He visto un leñador cortar el árbol que tenía grabada en su corteza gris tu nombre junto al mío. El árbol ya no está cumplió con su destino sus ramas quemarán y sólo quedarán cenizas. Quiero que grabes en mi piel y el corazón como aquel que en ese árbol una vez sin compasión dibujé. Yo sé que el árbol quemarán y el corazón que grabé con nuestros nombres arderá y brotaran recuerdos recuerdos, recuerdos.