Te dolían las manos, te dolían las piernas, te dolían los ojos, no querías mirar. Se acabaron lo sueños, se secaron las plantas, se pincharon los globos, despertó la verdad. Todo tu cuerpo ayer se transformó en un viejo receptor de dolencias que no sabés quién carajo inventó. El alma se te deshizo y nadie quiso pegarla. Te carcomió la malaria, estás hecho un trapo de piso. Levantá la moral, ponete un cacho las pilas, que si no salís a patear lo tuyo va para atrás. No quería migajas de la vida de otros pero no alcanzaba para hacerte feliz. Por más fuerza que hagas no te cambia le cara donde está taladrada una anugstia feroz. La demencia un día te mordió los talones y siguió agitando su bandera cruel como que está todo bien. Y los golpes dejan marcas, y como duele mostrarlas. De eso nunca se habla, o no encontrás las palabras. Se atraganta el dolor, se te reveintan las venas y se alarga la pena que duerme en tu corazon. DICEN QUE ESTAS SOMATIZANDO, YO TE VEO FATAL. Final: