LOS ACORDES SE REPITEN Una vieja rezando en la novena al sentir el armonio, vidita, gritó primera. Gritó primera sí con tantas ganas pelaron los pañuelos, vidita, y se armó la farra. Se armó una farra de esas que no se empardan bailemos dijo el cura hasta que las velas no ardan me gusta el oro en pepa vidita viva la cueca. En lo mejor del baile se abrió la puerta y el sacristán entraba, vidita, y haciendo zetas Viva el vino! gritaba siga el bailongo! que mientras ellos bailan, vidita, yo me lo tomo. Y así se acaba el cuento y así la cueca bailada por el cura, vidita, y aquella vieja. Me gusta el oro en pepa vidita, viva la cueca.