los que nunca les tiraron la goma a los que un poco les rompieron el culo, a los que entre desconocidos la probaron, a los precoces que acabaron con apuro... A los que los cuernearon por confiados, a los que se les burlaron de la pija, a los que cogen solamente con regalos, a los que los extorsionaron con caricias... yo los considero mis hermanos. Por que lo único que tenemos es lo que cagamos. ¡Que mierda de riqueza! -dirán- ¡Qué cagada! No entienden nada. A los que los extraterrestres los violaron, a los que no se les paraba sin amor a los que no pueden dormir contando viejas, a los que una pendeja puta los cagó. A los que por pajeros tienen su medalla, a los que viven solos solos de verdad, a los que pegan la poronga a la pantalla, y la payasa sólo los hace llorar... yo los considero mis hermanos. Por que lo único que tenemos es lo que cagamos. ¡Que mierda de riqueza! -dirán- ¡Qué cagada! No entienden nada. A los que el diablo les escriben lo que sueñan, a los que creen que las cualquiera son de todos, a los que no levantan nunca una pollera, a los que siempre de la fiestas se van solos. A los que saben que no saben nunca cómo, a los que besan los espejos y se miran, a los que tienen miedo de sentirse trolos, a los que saben que su tiempo ya termina... yo los considero mis hermanos.