Podría pedirte un triciclo con motor o un duendecillo que no haga travesuras, un armadillo, una cometa o un camión o una potente metralleta de burbujas. Podría pedirte un submarino militar o un uniforme de astronauta a mi medida, un perro enorme, una cometa o un radar o un telescopio para verte de cerquita. Y así podría pedirte tantas cosas, las más sencillas, las más costosas, las que mañana olvidaré en un cajón. Por eso no, este año habrá una carta menos en tu buzón, porque al fin he comprendido que la paz no es G.I. Joe, es por eso que si vienes ven con todo tu escuadrón, a poner fin a esta guerra dentro de mi corazón. Por eso no, este año habrá una carta menos en tu buzón, porque al fin he comprendido que hay millones peor que yo, es por eso que si vienes trae contigo la ilusión, para aquellos que te esperan bajo un techo de cartón. Y ahora te dejo continuar con tu labor de hacer felices a quien más te necesita, y si te sobra un momentito, por favor, puedes usarlo para hacerme una visita. Te esperaré pacientemente en la escalera, con las pantuflas y la tetera para sentarnos un momento a platicar pues tenemos mucho de qué hablar. Por eso no, ...