Nunca fuimos por un helado ni caminamos de la mano ni nos miramos bajo un farol. No fue un amor de adolescentes ni mucho menos fue decente la convergencia fue el colchón. La antítesis del amor en este caso llegó a su máxima expresión. No fue un amor de fantasía no fue impulsor de la poesía fue manoseo y excitación. La antítesis del amor en este caso llegó a su máxima expresión.