Perdia tanta sangre doce años de dolor Y cada dia iba peor en manos de doctores Gasto todo su haber y nada podia hacer Había escuchado, hablar sobre jesús. Por detrás se le acercó; entre la multitud Su manto le tocó, pues ella pensaba así: Con que solo toque su manto Sanare, sanare Con que solo toque su manto Sanare sanare…………………….. coro Ya no perdia sangre, la fuente se seco Curada por su fe quedo Había alcanzado. del cuerpo del señor La gracia de su sanación. jesús el nazareno Pasa hoy aquí, de él emana un gran poder. Acércate con fe como aquella mujer, arrebátale su favor.