Intro: Todo comenzó, allá en el Edén; solitario el hombre estaba y Jehová pensó: "No es bueno que el hombre solo esté, le haré una ayuda idónea, sólo para él" Y formó a la mujer, hueso de mis huesos, carne de mi carne, siempre te amaré. Y formó a la mujer; eres vaso frágil que Dios ha creado, ¡yo te cuidaré! Hombre y mujer. El tiempo pasó, solitario me encontraba yo; una bella mujer a mi lado el Señor me envió. Tú eres la mujer, mi esposa, mi amada eres tú; en las buenas y malas contigo siempre yo estaré. Coro