La Iglesia dice 'ven' y la esposa dice 'ven'. Y el Espíritu también hoy me ayuda a interceder. Y por todas las naciones surge un pueblo vencedor. Es un pueblo que anhela verte hoy Señor. Oh, oh, oh ven Señor. Ven Señor Jesús. El Espíritu y la esposa dicen 'ven'. (misma secuencia del inicio) Levantando nuestra voz, nuestras manos al Señor. Adoramos a Aquél que ha vencido con poder. Y por todas las naciones se levantará una voz, La Esposa del Cordero diciendo 'ven Señor'.