¡Santo! ¡Santo! ¡San-to! Tu gloria llena cielo y tierra ¡Hosan- na! hosanna, glo-ria a Dios! Te bendecimos, te adoramos, glorificamos tu nombre, oh Dios ¡oh Rey del cielo, oye clemente nuestra fer-viente y humilde voz Perdona al hombre la falta impía; Mira a tu Hijo, mi Redento Ferviente entonces el alma mía Pueda alabarte con todo amor Dignos seamos de bendecirte, Limpias las almas de todo mal Cielos y tierra cantan tu nombre, ¡Oh Dios, oh Padre, Rey celestial!