En la profunda hondura humanitaria de la mente y del espíritu se gestaron las corrientes sociales en forma natural y así se expresaron: como el agua, como el sol, como el aire que bañan, aclaran, iluminan y dan vida porque todos vivimos en el mundo común. Juan Guillermo Ortíz Guier. ) Aquel día de sol
 se hicieron claras las ideas y se rompieron las paredes ) del clásico hospital. ) Dicen fue un luchador quien alzó su voz bandera y se rompieron las paredes ) del clásico hospital. Y hubo fiesta, gente despierta
 y su mujer con las criaturas ) se sumó. Y hubo fiesta, gente despierta
 Y el campesino su salud enriqueció. Cuentan que Juan Guillermo soñó distinto con buen instinto
 ) el cambió proclamó. Fueron tiempos de lucha y amar la vida mano incisiva
 que a todos protegió. Ahora es bueno recordar
 Al benemérito nacional
 de esa gente que se atreve ) a darlo todo. Vino el cambio en el lugar
 El respeto regional
 Por un hombre ) que se atreve a darlo todo. Y hubo fiesta, gente despierta
 y su mujer con las criaturas ) se sumó. Y hubo fiesta, gente despierta
 Y el campesino su salud enriqueció. Ahora es bueno recordar
 Al benemérito nacional
 de esa gente que se atreve ) a darlo todo. Vino el cambio en el lugar
 El respeto regional
 Por un hombre ) que se atreve a darlo todo. Como trombas de amor corrieron el mensaje cambiando la actitud pasiva y conformista de nuestro campesino por la lucha constante de energía sin desmayo con la frente despierta e incisiva como llama encendida en noche obscura tu campesino luchador se organizó en su pueblo con todo su derecho a respirar. Salud.