Diez y diez viernes en la noche el final de otra cruel semana todos ya tienen un plan pero hoy no estoy pa' bailar diez y treinta desplomados ya en la cama los amigos nos acusan de aburridos nos falta la urgencia de ayer quizás pero algo me dice que en las noches tan lentas la luna se crece y la magia comienza se por experiencia que la cosa calienta como a las once y once ya veras Diez y cuarenta te beso en el cuello y desde ahí, comienzan los sucesos tu cuerpo no ha dado señal pero, no ve voy a desanimar Las y cincuenta una mordida en la oreja da resultado, pues te pone en alerta no me quiero apresurar que va pero cuando te noto la piel erizada se que ya vas rumbo a morder la almohada miro el reloj y no se como pasa pero a las once y once quieres mas no se si es de buen gusto continuar pero nunca me he sabido censurar y entre tirones de pelo y arañadas de espaldas los vecinos oyeron mas de lo que soñaban el final mas perfecto para esta dura semana te veías tan hermosa ahí toda despeinada Diez a.m. despierto aquí a tu lado que suerte tengo de despertar aquí a tu lado.